Este leonés de nacimiento y showman de profesión, Julio A Secas, toma las riendas de El Club de los Increíbles. ALMERÍAdeFIESTA tuvo el placer de hablar con él momentos antes del espectáculo.

¿Por qué Julio A Secas?

Había una lista interminable de posibles nombres, Julio el listo, Julio el cómico, Julio Tucu Tucu... Estando con un amigo que también se dedica al espectáculo le dije que prefería mi nombre, Julio a secas y punto, y mi amigo me dijo que Julio y de apellido A Secas. Al principio la gente se liaba, en los carteles me ponían solamente Julio. Pasaron los años y me vino como anillo al dedo. Yo soy de León y ya se sabe que allí somos un poco secos.

Además de cómico eres un showman...

No soy el típico monologuista, hago parodias, personajes y se me caracteriza por la puesta en escena. Yo soy muy eufórico y atípico. Hay que ser completos, hay cómicos que tienen muy buenos guiones y simplemente se limitan a contar una historia sin expresarla a nivel físico. Yo intento hacer reír desde que me subo al escenario, con las palabras, la puesta en escena, con los gestos y con las caras.

¿Qué espacio dejas a la espontaneidad en tus números?

Siempre sé lo que voy a contar, pero dejo una parte importante a la naturalidad y frescura. A veces te repican los chistes, o alguien se levanta y tú tienes que estar atento y bromear con eso. Al principio era muy bruto y no pensaba lo que decía. He llegado a un punto en que esas improvisaciones, de algún modo, están ya guionizadas. Aun así en todos los espectáculos sale algo nuevo.

¿Hay chistes malos o malos contadores de chistes?

No hay duda, hay malos contadores de chistes. Yo tengo chistes muy malos y funcionan muy bien. A mi me gustan los chistes absurdos y surrealistas. Todo depende de la forma de contarlos y en el momento en el que lo haces.

¿Qué es lo que a ti te hace reír?

Las absurdeces, las cosas cotidianas, el doble sentido. Me río mucho con Aterriza Como Puedas, Top Secret, Hot Shoots...

¿Qué es lo que a ti te hace llorar?

Las injusticias, el desamor, la traición, la gente que te ve siempre como cómico y se olvida de que ante todo eres persona.

¿Cuáles son tus cómicos de referencia?

Para mi punto de ver, Martes y Trece hacían un humor muy fino y serio, me parece un humor muy correcto y popular. Yo me identifico mucho con el humor que hace José Mota, un humor muy cotidiano y muy sofisticado. Es un humor muy surrealista.

¿Para un cómico es peor el silencio que el llanto?

El silencio es bueno, pero dependiendo de qué silencio. Si durante 15 minutos el público está en silencio, si que tienes un problema. Para mi el silencio sirve de ayuda. Es ahí donde te das cuenta si estás enganchando con el público o no, te das cuenta si lo que estás contando funciona o no funciona. Ahora mismo yo tomo los silencios para coger más fuerza. En mi espectáculo 5 o 10 minutos sin risas ya es preocupante.

¿Dónde crees que están los límites en el humor?

El humor es como una pizza. Le pones los ingredientes que quieres dependiendo si la quieres más picante, más surrealista, más descarada o más sutil. El limite está que como profesional veas hasta donde puedes llegar. Creo que el límite está en ser picante pero sin ser chabacano, o en ser vulgar pero sin ser demasiado rastrero. El límite te lo pone el público.

¿Te escudas en el humor para decir lo que piensas?

A nivel personal no, pero cuando tengo que ligar si que recurro a él. Es un buen filón.

¿Qué es lo más surrealista que te ha pasado en medio de una actuación?

Fue en Mallorca. Estaba actuando en una boda, serían las 2 de la mañana. En medio del show vi cómo las personas mayores empezaban a levantarse y en medio de la pista comenzaban a despedirse.

¿Cómo es el sentido del humor de los almerienses?

Almería me parece la parte más cuerda y más seria de Andalucía. El sentido del humor de los almerienses es muy respetuoso y muy agradecido, al finalizar siempre recibo de ellos una gran ovación.

¿Qué se te pasa por la cabeza cuando te dicen que tienes que actuar en Almería?

En Almería me siento como en casa. He actuado en Adra, Roquetas de Mar, Aguadulce... Venir a Almería me hace pensar las vueltas que tengo que dar para llegar aquí desde Mallorca. Me suelen llamar mucho para actuar aquí. En Almería hay que hilar más fino.

¿Dónde te gusta perderte en Almería?

En Roquetas de Mar y Aguadulce. El centro de Almería y la Rambla son una pasada y sus calles y locales son un buen sitio para perderse.

¿Recomiendas Almería?

Muchísimo, no entiendo como los políticos no potencian las comunicaciones, tenéis unas playas tremendas, un clima envidiable y un carácter excepcional.

Entrevista realizada por:
JOSE MARÍA ROMERO GARCÍA